
Un fenómeno de área hoy en día, sería la necesidad que tienen varios estados de Latinoamérica de adquirir dinero prestado del FMI: México, Uruguay, Ecuador y Argentina, entre otros.
La fuga de capitales, la caida en la recaudación impositiva debido a la baja de exportaciones, y la retracción crediticia, crean un clima en el que la inyección de liquidez al sistema resulta necesaria para garantizar el funcionamiento de la economía en su totalidad: préstamos, pagos, importaciones, generación de credibilidad, etc.
El problema con estos prestamos resulta de las condiciones que exige el organismo internacional. En el pasado propiciaron el desarrollo del libre mercado sin trabas, con sus consecuencias destructivas incluidas.
El problema con estos prestamos resulta de las condiciones que exige el organismo internacional. En el pasado propiciaron el desarrollo del libre mercado sin trabas, con sus consecuencias destructivas incluidas.
Resulta fundamental el “buen comportamiento” para acceder al crédito. La conducta que deben tener los Estados hace recordar a la psicología de las prisiones, donde el preso que esta mejor conceptuado por el carcelero, el más "tranquilo y previsible", es el que consigue mejor status. La economía funciona igual, es una gran jaula.
El FMI constituye una salida pero también una nueva atadura. Estas son las condiciones, asi es el mundo.
Navarro Adrian
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