domingo, 21 de junio de 2009

El shock Volcker y la espiral de deuda

En 1979 el presidente de la Reserva Federal, Paul Volcker, tomó la decisión de aumentar la tasa de interés en Estados Unidos, es decir, incrementar el valor del dólar, moneda de alcance mundial ya por aquellas épocas.

El incremento se dio como parte de un proceso previo de reestructuración. Estados Unidos estaba atravesando una situación en la que dejó de ser el hegemón y pasó a ser el señor del mundo. Es importante considerar que los movimientos socialdemócratas emergentes en otros países y la derrota en Vietnam, determinaban un contexto que polarizaba el mundo.

La decisión impactó directamente sobre los países en desarrollo, como los latinoamericanos y algunos africanos. El aumento en la tasa ocasionó el incremento en los intereses que se cobraban por las deudas que habían contraido empresas y Estados de todo el mundo. Se hizo común en la época recurrir a créditos para poder hacer frente a los pagos de préstamos anteriores.


Este fenómeno recibió el nombre de “espiral de la deuda” y provocó que los compromisos monetarios brasileros se duplicaran en seis años. En Argentina, de igual manera, hubo un incremento importante, y también en países de todo el mundo. Una oleada de quiebras se dio incluso dentro del propio Estados Unidos. El impacto fue global.

Una desestabilización económica de éste tipo creo las condiciones óptimas para el desarrollo e inserción de nuevas ideas políticas. Las cosas se hicieron más fáciles para el imperio: la voluntad opositora de los países se hizo más débil y la capacidad negociadora de cada nación perdió considerable peso. La renuncia a la soberanía se tradujo en una deuda grande e impagable.

La marcha sin obstaculos para la economía de libre mercado se iba haciendo triunfal día tras día.





Adrian Navarro