domingo, 7 de junio de 2009

Menem y Cavallo tuvieron la culpa

Es común en el análisis argentino la explicación de los fenómenos de forma simplista. ¿Quién fue el culpable de todo lo malo que pasó en la década de los noventa? La respuesta es obvia: “Menem y Cavallo”. ¿Pero que hicieron? “Se robaron todo, son unos ladrones”, respondemos con el orgullo que otorga la seguridad de saber de lo que estamos hablando. Nuestra habilidad crítica se termina ahí, pero el efecto psicológico que proporciona esa respuesta es funcional, evita que nos veamos como tontos engañados y refuerza nuestra confianza intelectual. Es una forma de simular que somos seres lúcidos y atentos.


El historiador Alejandro Olmos Gaona descubrió en 2006, mientras buscaba el contrato en el cual se solicitó al Citibank y J. P. Morgan que organicen el canje de deuda del Plan Brady, un documento de 1400 páginas elaborado por los dos bancos estadounidenses para el entonces ministro de Economía Domingo Cavallo en donde se encontraban detalladas las políticas que seguiría el gobierno argentino a partir de 1992.




La reforma de la ley laboral, la privatización del sistema de pensiones y de empresas de servicios y suministros públicos, fueron sugerencias que estaban detalladas minuciosamente en el manual y que se siguieron al pie de la letra.


El historiador encontró también en los archivos del Ministerio de economía una carta del entonces Director Gerente del Fondo Monetario Internacional Michel Camdessus dirigida a la comunidad financiera internacional donde decía que se debía aprobar toda la política económica del gobierno porque la Argentina se había comprometido a transformar el país a través de las privatizaciones de las empresas públicas.


La realidad de nuestro pasado resulta más compleja (o más simple) de lo que creemos. Es fundamental no perder de vista el carácter global e internacional de las ideas y políticas que se aplican. Bajo este contexto, el peso de las figuras de Menem y Cavallo se desvanece ante la inmensidad de un mecanismo mundial de dominio.


Navarro Adrian